¿Quiénes somos?

Quienes hacemos La Plaga, somos tres educadores costarricenses que también hemos tenido alguna formación artística. Los tres somos defensores del idioma materno, aunque desde distintas posiciones. Uno es terriblemente dogmático, otro pragmático y el tercero, Roncahuita, que es el que firma, prefiere ocuparse de Cinearte, aunque hace sus contribuciones a La Plaga.


Tenemos a su disposición tres diccionarios (pulse sobre los enlaces para ir a ellos) :



Cuando hablen o escriban por favor...

" A SHAKESPEARE LO QUE ES DE SHAKESPEARE Y A CERVANTES LO DE CERVANTES."



viernes, 30 de abril de 2010

Los anglicismos y la prensa escrita (Con base en La Nación)

Fragmento tomado de : "Los anglicismos en la prensa latinoamericana y su impacto social y lingüístico"(Artículo completo en:http://www.costarricense.cr/pagina/tesisanglicismos/)

Autores

Prof. MSc. Alberto Delgado Álvarez

Prof. MSc. Gilberto Hernández Quirós

UCR

El material fue recolectado del periódico “La Nación” de Costa Rica durante la primera semana del 2001.


Los Anglicismos y la Prensa Escrita

La prensa es un medio de comunicación escrita que llega al lector a través de diarios, semanarios, revistas y publicaciones periódicas. Un periódico ofrece diariamente información sobre los principales acontecimientos a nivel nacional e internacional. Un semanario es muy parecido a un periódico pero sólo se publica una vez a la semana. Una revista trata sobre temas más específicos y se dirige a cierto segmento específico de usuarios; se publica semanal, mensual o anualmente.

En varios periódicos de América Latina es posible encontrar ciertos préstamos del inglés que, en muchos casos, pueden ser reemplazados por sus correspondientes palabras en castellano. Es importante recalcar la responsabilidad de los periodistas en la defensa del uso adecuado de la lengua. Teniendo en cuenta criterios normativos y juicios de valor, muchos afirman que los periodistas utilizan mal el español, lo cual no es del todo cierto. La mayoría lo utilizan bien o incluso muy bien. No obstante, basta con que unos pocos no lo utilicen adecuadamente para que sus errores y sus desvíos de la norma lleguen a muchísimas personas. Ese es el poder de la prensa: lo que escribe un periodista llega a cientos de miles, a millones de personas, muchas de las cuales tienden a tomar como modelo el lenguaje de la prensa, y si ese modelo promueve errores o, desde la perspectiva de la gramática normativa, usos no adecuados, los resultados pueden ser muy negativos.*

Esa responsabilidad se extiende a la Internet, pues cada vez son más los periódicos y las revistas en español que tienen edición electrónica, edición "on line", y pueden leerse en cualquier parte del mundo en la pantalla de una simple computadora; por ejemplo, Siglo XXI y La Prensa Libre de Guatemala, El ABC de Madrid, El Clarín de Buenos Aires, El Tiempo de Bogotá o El Nacional de Caracas. Los manuales de estilo de los diarios establecen que dentro del género periodístico hay diferentes subgéneros, como los informativos y los de opinión. En tanto que en los primeros la noticia debe ser dada de la forma más objetiva posible, en los artículos de opinión se ofrece una mirada personal de algún suceso destacado. Pero en todo enunciado se filtra el parecer de quien lo formula y hasta en la nota más "aséptica" es posible encontrar alguna marca subjetiva. Las fronteras entre ambos subgéneros, por lo tanto, son bastante débiles. Una misma noticia puede suscitar una reacción pública diferente de acuerdo a cómo aparezca y tanto el periodista como el lector deben ser conscientes de que cada información está atravesada por las ideas de quien la escribe.

Otro procedimiento muy empleado en la prensa escrita es la "sigla" o acrónimo, que se obtiene mediante la unión de las iniciales de una frase. Creadas por razones de "economía" del lenguaje, las siglas reemplazan a los enunciados de los que surgen. Así tenemos, ONU, DRAE y ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados). Este procedimiento de la lengua está muy extendido en todos los idiomas y los medios de comunicación favorecen su difusión a tal punto que las siglas se transforman en una palabra más, como el caso de "ovni", que deriva de "objeto volador no identificado". En ocasiones, estos acrónimos o siglas no se traducen, se dejan tal cual como su original en inglés pero con una explicación entre paréntesis. Por ejemplo, la NASA, cuyas siglas en inglés no se traducen, pero se puede incluir una explicación entre paréntesis para que el lector entienda que se trata de una entidad dedicada a asuntos espaciales.

Por otro lado, el área de la informática, el doblaje y subtitulado de películas y el mundo de las finanzas, por mencionar algunos, son frecuentemente campo fértil para cambios de vocabulario y de la sintaxis. Por ejemplo, usualmente se escucha a alguien sentado frente a una computadora comentar que "está printeando un documento", o que "está deleteando”; este es un caso típico de cambios innovadores, ya que el hispanohablante no reconoce esos dos verbos como elementos de su código lingüístico; en efecto, dos verbos españoles pueden expresar claramente esos conceptos: "imprimir" y "eliminar".

Según Ana Maria Macioni (1997), cuando se lee el subtítulo de una película, no es de extrañar que con la mayor naturalidad, un joven diga "Señorita, permítame que le introduzca (introduce) al profesor Smith" , cuando, en realidad, tendría que "presentar" a esa persona. Hay personajes que se oponen a hacer algo y muy enojados dicen: "¡Ni modo! (No way!) en vez de: "de ninguna manera". También los actores se ponen de acuerdo por teléfono y finalizan la conversación con la expresión "llámame para atrás" (phone me back) para confirmar el encuentro. La mayoría de las traducciones de expresiones usadas en inglés son inadecuadas, ya que para mitigarlas en la pantalla, no reflejan ni la ira, ni la violencia o la angustia que el personaje está sufriendo. El hablar es dinámico y cada acto de habla debe ser traducido con la misma fuerza ilocutiva que el hablante le quiso imprimir. En la vida cotidiana, a menudo, las personas recurren a las denominadas "malas palabras" para hacer catarsis en un momento de tensión o de indignación. Pero esto no siempre se ve plasmado en los subtítulos de las películas.

En cuanto a las empresas, éstas envían invitaciones por escrito a sus miembros, recordándoles que habrá un "meeting" (reunión) para acordar políticas de "marketing" (comercialización) para obtener buenos "responsos" (respuestas, responses en inglés) en el lanzamiento de un nuevo producto. A tales efectos deben leer la "literatura" (documentación/propuesta) que se les entregó para discutirla con los "CEO'S" (ejecutivos principales/máximos), y "managers" (gerentes), quienes traen "novelties" (nuevas ideas/novedades) sobre "franchising" (franquicias). Para confirmar la asistencia, el "board" (directiva) solicita que los "aplicantes" (interesados en participar) completen la "forma" (el formulario) que se adjunta, consignando si podrán cumplir el "schedule" (programa) previsto de acuerdo con su propio "timing" (tiempo/horario disponible).

Los anteriores son típicos casos de calcos innecesarios que, a veces, distorsionan el significado original del término utilizado. Si esta tendencia continúa, se caerá en el problema mayor de las confusiones semánticas. Por eso, es indispensable cuidar la redacción, la estilística y sobre todo la traducción de términos. No en vano existe la famosa frase que versa “traduttore è traditore”, pues no siempre el traductor plasma lo que realmente significa una frase.

*La cursiva y negrita es de los autores del "La Plaga".

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Haga su comentario, es muy importante para nosotros y para los amigos.