Hola:
Unas reflexiones sobre este tema:
Monolinguismo y dictadura.
Cada uno está persuadido de que piensa libremente: ¡faltaría más!
Pues, no.
Pensamos sólo y exclusivamente dentro del marco de nuestro idioma: de su semántica, de su sintaxis, de sus paradigmas y estereotipos.
A veces, unos simples ejemplos cotidianos son reveladores del fenómeno: un francés dirá "j'ai échappé ma tasse de café", cuando un español declara "se me cayó la taza de café".
En el primer caso el sujeto --el culpable-- soy "yo", puesto que el "yo" realizó la acción; en el segundo no; en el segundo, el sujeto es la taza que realiza la acción, en contra del "yo": ¿desresponsabilización implícita?
Otro ejemplo: la Academia española desconoce la palabra "laicidad"; sólo registra "laicismo". Pero da el caso de que las palabras terminadas en "-ismo" suelen connotar integrismo, sectarismo (como estas mismas pabras).
Entonces, con la palabra "laicismo", ¿se puede pensar una laicidad apaciguada, racional, serena, libre de polémica? Pienso que no.
Un ejemplo más: en Francia, hablando de una persona que se murió, se suele decir "Il a rendu son âme à Dieu" (= Entregó su alma a Dios), cuando en unos países orientales se dice "Entregó su cuerpo a la tierra".
¿Quién es el sujeto "él" en cada una de las situaciones?
¿Se puede filosofar o hablar de religión de la misma manera con unos presupuestos lingüístico-culturales tan dispares?
El monolingue sólo se puede mover en los límites semánticos de su idioma. Un día se me ocurrió escribir un texto titulado "Campo semántico; finca privada; prohibida la entrada". (el dibujo adjunto es mío)
Bien lo entienden los dictadores cuando, lo primero que hacen es anular las diversas lenguas regionales o vernáculas que no sean la del estado, porque el bilingüe es un sujeto poco o mal controlable, en lo más íntimo de su pensamiento. No es adoctrinable.
Es así como entiendo la frase de Carlos Fuentes: "El monolingüismo es una enfermedad curable".
Muy cordial saludo.
Daniel DESCOMPS
Blog: Jouet_Rustique
Se las trae este texto. Me acuerdo cuando Franco obligaba en España al uso nada más del castellano: Joan Manuel Serrat se llamaba Juan Manuel Serrat, y así todo.
ResponderEliminarSi, don william: es un texto para reflexionar. Me pregunté si realmente pensamos dentro del marco de un idioma o hay otros elementos que también influyen y son determinantes.
ResponderEliminarTambién lleva a reflexionar en los factores que le ponen límites al pensamiento mismo.